Pablo Solari: El extremo explosivo que impulsa a River hacia adelante

La historia del joven sanluiseño que conquistó el Monumental con su velocidad y garra, pero terminó volando hacia Europa

En febrero de 2025, River Plate se despidió de uno de sus grandes talentos ofensivos. Pablo César Solari Ferreyra, el extremo nacido en Arizona, San Luis, cerró su exitoso ciclo millonario para emprender una nueva aventura en el Spartak de Moscú. Su partida marcó el final de una era caracterizada por la velocidad, la explosividad y una capacidad única para desequilibrar que lo convirtió en una de las piezas más valiosas del plantel.

 

De pueblo chico a la gloria millonaria

La historia de Solari comenzó en un pueblo de apenas 1.000 habitantes en San Luis, donde dio sus primeros pasos en el Club Social y Deportivo Arizona. En 2014, a los 13 años, tuvo pruebas en River y Vélez, pero finalmente quedó en Talleres de Córdoba en 2015. Allí se forjó como futbolista, pasando de ser centrodelantero a extremo derecho, una posición que terminaría definiendo su estilo explosivo.

Su primer gran salto llegó en 2020 cuando, tras no conseguir lugar en Talleres, fue cedido a Colo-Colo de Chile. En el Cacique no solo encontró la oportunidad de debutar profesionalmente, sino que se convirtió en héroe al marcar el gol que salvó al club de descender a Segunda División. Ese momento marcó el inicio de una carrera ascendente que lo llevaría directamente al Monumental.

La irrupción que sorprendió a todos

El 18 de julio de 2022, River Plate anunció oficialmente la contratación de Pablo Solari. El club desembolsó 4.5 millones de dólares por el 60% de su pase, convirtiéndolo en el cuarto refuerzo de Marcelo Gallardo para esa temporada. “Muchos sentimientos encontrados. Estoy contento si se llega a dar este paso es un gran paso para mi”, declaró el joven antes de embarcar rumbo a Buenos Aires.

 

Su adaptación fue tan rápida como impresionante. Debutó apenas tres días después de firmar su contrato, en la victoria 1-0 ante Gimnasia en el Monumental. Pero fue en su cuarto encuentro, frente a Newell’s, donde realmente explotó: marcó sus primeros dos goles para el 4-1 millonario. La estadística era demoledora: había hecho siete tantos con solo nueve tiros al arco en sus primeros partidos.

Un estilo que enamoró al Monumental

Pablo Solari llegó a River con características únicas que lo diferenciaban del resto. Su velocidad pura, combinada con una gambeta efectiva y una capacidad de definición sorprendente, lo convirtieron rápidamente en favorito de la hinchada. En Colo-Colo había sido destacado como uno de los mejores regateadores del continente en la Copa Libertadores, y esas habilidades las trasladó intactas al fútbol argentino.

Su versatilidad táctica fue otra de sus grandes virtudes. Podía jugar como extremo derecho, segundo delantero o incluso como centrodelantero ocasional. Esta polivalencia lo hizo invaluable para los entrenadores, quienes siempre encontraban en él una alternativa confiable tanto desde el inicio como ingresando desde el banco.

 

“El delantero de 23 años es una pieza clave para Demichelis por sus números en cuanto a goles y asistencias, y por las funcionalidades que le da al DT jugando tanto como segundo punta o como extremo”, destacaban los medios especializados sobre su importancia en el esquema riverplatense.

Los números que hablan por sí solos

Durante sus dos años y medio en River Plate, Solari disputó 110 partidos oficiales, marcó 30 goles y brindó 17 asistencias en 5.996 minutos de juego. Estos números reflejan su consistencia y aporte ofensivo, pero más allá de las estadísticas, su impacto se medía en momentos decisivos y en su capacidad para generar peligro constante.

En la temporada 2024, antes de su partida, había disputado 6 partidos marcando 1 gol y brindando 1 asistencia. Su precisión de tiro era del 48.78%, y realizaba 4.42 disparos por cada 90 minutos en el campo, demostrando su vocación goleadora y su constante búsqueda del arco rival.

Su rendimiento no pasó desapercibido a nivel continental. Durante su participación en la Copa Libertadores, fue incluido en el equipo ideal en varias ocasiones y reconocido como uno de los mejores regateadores del torneo, confirmando que su talento trascendía las fronteras nacionales.

Títulos y momentos gloriosos

Con la camiseta millonaria, Solari conquistó tres títulos importantes: la Liga Profesional 2023, el Trofeo de Campeones 2023 y la Supercopa Argentina 2024. Cada uno de estos logros tuvo su aporte, ya sea con goles decisivos, asistencias clave o simplemente generando el desequilibrio necesario para que el equipo encontrara espacios.

 

Su capacidad para aparecer en los momentos importantes lo convirtió en un jugador de jerarquía. Los hinchas recordarán especialmente sus actuaciones en partidos trascendentales, donde su velocidad y técnica fueron fundamentales para inclinar la balanza a favor del Millonario.

El interés europeo y la decisión final

A medida que su rendimiento en River se consolidaba, los grandes clubes europeos comenzaron a fijarse en él. Nápoli de Italia fue uno de los primeros en mostrar interés serio, seguido por el Lyon de Francia y varios clubes de otras ligas importantes. Sin embargo, fue el Spartak de Moscú quien finalmente se decidió a ejecutar la cláusula y llevárselo.

El 11 de febrero de 2025, Solari fue presentado oficialmente como nuevo jugador del Spartak Moscú. El club ruso desembolsó 12 millones de dólares por su pase, una cifra que puede llegar hasta los 12.4 millones si se cumplen todos los objetivos establecidos. “Hola fanáticos de Spartak. Ya estoy en casa. Muy contento de estar acá, espero darles muchas alegrías”, fue su mensaje al poseer con la camiseta rusa.

El legado de un crack en potencia

La partida de Pablo Solari dejó un vacío importante en la ofensiva de River Plate. Su capacidad para desequilibrar, generar espacios y definir con precisión lo habían convertido en una pieza fundamental del engranaje millonario. Con apenas 23 años al momento de su partida, su margen de crecimiento seguía siendo enorme.

Su paso por River sirvió como plataforma de lanzamiento hacia el fútbol europeo, demostrando que el club de Núñez sigue siendo una excelente vidriera para los talentos sudamericanos. La venta millonaria también benefició económicamente al club, generando recursos importantes para futuras incorporaciones.

 

Una despedida que abre nuevos horizontes

El último partido de Solari con la camiseta millonaria se dio en condiciones particulares: ni siquiera fue convocado para el encuentro ante Instituto, ya que su transferencia al Spartak se había cerrado horas antes. Se despidió de sus compañeros en silencio, agradeció al club que lo catapultó al estrellato y emprendió vuelo hacia Moscú.

Su historia en River queda como ejemplo de lo que puede lograr un jugador con talento, trabajo y determinación. Llegó desde un pueblo de 1.000 habitantes en San Luis, pasó por Chile para foguearse, y encontró en el Monumental el escenario perfecto para mostrar su explosividad y calidad.

Pablo Solari demostró que en el fútbol moderno la velocidad, la técnica y la versatilidad son valores fundamentales. Su capacidad para adaptarse a diferentes posiciones, su efectividad de cara al gol y su personalidad para asumir responsabilidades lo convirtieron en el extremo explosivo que River necesitaba para impulsar su juego ofensivo.

Mientras el Spartak de Moscú celebra la llegada de su nueva estrella, River Plate guarda en su memoria los momentos brillantes de un jugador que supo honrar la camiseta millonaria con goles, asistencias y, sobre todo, con la garra de quien sabe que cada oportunidad puede ser la definitiva.

author avatar
Ralitsa

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *